No actúes «por tu cuenta»
No actúes «por tu cuenta»
Zorobabel fue llamado a reconstruir el templo. Era un cometido enorme, así que Dios le dijo: «No es por el poder ni por la fuerza, sino por mi Espíritu, dice el Señor… Nada impedirá el camino de Zorobabel, ni siquiera una montaña gigantesca» (vv.6-7 NTV). Cuando Dios te llama, necesitas saber: (1) Es posible que tengas que caminar solo. Cuando Dios te usa, con frecuencia la gente asume que eres fuerte y que no necesitas nada. No se dan cuenta de que eres simplemente una persona común y corriente, que está muerta de miedo la mitad de las veces y que está más sorprendida de tu éxito que ellos mismos. Y cuando nadie está a tu lado o te ministra, te vuelves vulnerable al desánimo. (2) Necesitas la ayuda de Dios o estás en problemas. Sansón descubrió esto: «Sansón despertó de su sueño y pensó: «Me escaparé como las otras veces, y me los quitaré de encima». Pero no sabía que el Señor lo había abandonado. Entonces los filisteos lo capturaron» (Jue 16.20-21). Dios retrocedió y dejó que Sansón viera que era Él quien lo hacía, y no él mismo. Así que, debes vivir con un sentido de dependencia de Dios. (3) Es el poder de Dios, no el tuyo, lo que marca la diferencia. Si estás esperando que Dios te dé unas herramientas extraordinarias antes de que decidas entrar en la pelea, no vas a experimentar victoria. «Mi [el de Dios] poder se perfecciona en la debilidad» (2 Co 12.9 RVR60). La manera de saber que estás verdaderamente ungido es cuando Dios toma herramientas de calidad inferior y hace proezas sobrenaturales. Y eso solo ocurre cuando dices: «Señor, no entiendo cómo puedes hacer esto a través de mí, pero estoy confiando en Ti». ¡Y es entonces cuando Él interviene!
Zacarías 4.6 NTV
«Entonces me dijo: El Señor dice a Zorobabel: “No es por el poder ni por la fuerza, sino por mi Espíritu, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.»
Devocional tomado de La Palabra para ti hoy Copyright ©2018 por Celebration, Inc. © Derechos reservados