¡SIGUE CAMBIANDO!
¡SIGUE CAMBIANDO!
Metamorfosis significa cambiar de una forma a otra. En el capítulo once de Hebreros, encontramos los nombres de personas famosas como Moisés y David. ¿Tenían ellos debilidades? Sí. ¿Tropezaron a veces? Sin duda alguna. Sin embargo, «su debilidad se convirtió en fortaleza. Llegaron a ser poderosos en batalla». Imagínate a una oruga transformándose en mariposa. El proceso comienza lento y pegajoso, le toma horas arrastrarse dos o tres pies. Sin embargo, cuando pasa por su metamorfosis, se convierte en una hermosa mariposa que puede volar grandes distancias simplemente usando las corrientes de aire. Las alas de la mariposa se desarrollan a consecuencia de su lucha dentro del capullo, hasta que puede liberarse. ¡Sin lucha, no hay vuelo! ¿Estás pasando por una lucha espiritual? Son esas luchas las que desarrollan tu fortaleza y son tus batallas las que traen tus victorias. Satanás no quiere que lo descubras. Su anhelo es que esa batalla te destruya,y por eso sigue presionándote. Cuando la vida de Pablo se convirtió tan difícil que pensó que no soportaría ni un día más, Dios le dijo: Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad»(2 Co 12.9 NTV). ¿Cómo respondió Pablo? Él escribe: «Ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí. Es por esto que me deleito en mis debilidades, y en los insulto, en privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo. Pues, cuando soy débil , entonces soy fuerte» (vv 9-10 NTV).
Heb 11.34 NTV
«Su debilidad se convirtió en fortaleza. Llegaron a ser poderosos en batalla»
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